Sharing for the Week with Kathy Tragos, Ed.M.
We are moving towards a new liturgical year, and shortly after to the Jubilee Year of Mercy beginning on December 13, 2015.
As we each seek God’s mercy, we are also asked to be merciful. “To live mercy, we must rediscover both the spiritual works of mercy (counsel the doubtful, instruct the ignorant, admonish sinners, comfort the afflicted, forgive offences, bear patiently those who do us ill, and pray for the living and the dead), and the corporal works of mercy (feed the hungry, give drink to the thirsty, clothe the naked, welcome the stranger, heal the sick, visit the imprisoned, and bury the dead).”
Forgiveness is what we highlight today as our Holy Father also speaks to that in his November 4th General Audience. An excerpt from the text follows:
“… Each day, in the words of the Our Father, we ask God to forgive us and to grant us the grace to forgive others. As difficult as forgiveness may be, it is essential for our personal growth, our capacity to acknowledge our failures and to mend broken relationships. It is a virtue we learn first in the family. Forgiveness strengthens families in love and, through them, makes society as a whole more loving and humane. It is a solid rock on which to build our lives and an eloquent sign of our Christian discipleship and obedience to the Father’s will. “
Written in the context of family given the recent Synod of Bishops on the Family, forgiveness applies to all. We all make mistakes but likewise become free when we forgive– as we no longer are held bound by the anger that consumes us inside. It is not easy, but it is possible. Open your hearts to forgiveness and make amends. It is after all, how we would wish to be treated. Our Holy Father’s address ends:
“May the coming Jubilee of Mercy encourage families everywhere to rediscover the power of forgiveness, and enable the great family of the Church to proclaim the power of God’s reconciling love at work in our world.”
SOURCE: Pope Francis general Audience of 4 November 2015; “Living Mercy in the Jubilee Year of Mercy” pdf. From USCCB; Kathy Tragos, Ed.M.
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El Perdón – Un paso para vivir la misericordia al aproximar el Jubileo de la Misericordia
Nos acercamos al nuevo ano litúrgico, y poco después al inicio del Jubileo de la Misericordia que comienza el 13 de Diciembre 2015.
Conforme pedimos la misericordia de Dios, nosotros también estamos llamados a ser misericordiosos. “Para vivir la misericordia, tenemos que redescubrir las obras de misericordia espirituales ( dar consejo a los dudosos, ensenar a los que no saben, amonestar a los pecadores, consolar a los que sufren, perdonar las ofensas, ser paciente con los que nos hacen mal, y rezar por los vivos y los muertos) y las obras de misericordia corporales ( dar de comer a los que tienen hambre, dar de beber a los que tienen sed, vestir a los que no tienen ropa, recibir a los extranjeros/extraños, cuidar a los enfermos, visitar a los encarcelados y enterrar a los muertos).”
Podemos atención hoy día al perdón así como nuestro Santo Padre también habla sobre el tema en su Audiencia General del 4 de Noviembre. Un extracto sigue:
“… Cada día, en las palabras del Padre Nuestro, pedimos a Dios que nos perdone y que nos conceda la gracia de perdonar a los demás. Tan difícil como el perdón puede ser, es esencial para nuestro desarrollo personal, nuestra capacidad de reconocer nuestros errores y para reparar las relaciones quebradas. Es una virtud que aprendemos primero en la familia. El perdón fortalece a las familias en el amor y, a través de ellos, hace que la sociedad sea más amorosa y humana. Es como una piedra solida sobre la que construimos nuestras vidas y a la vez un signo elocuente de nuestro discipulado cristiano y de obediencia a la voluntad del Padre. ”
Aunque escrito en el contexto de la familia, el perdón aplica a todos. Todos cometemos errores, pero nos libramos al ofrecer el perdón—porque ya nos detiene la ira que nos consume por dentro. No es fácil, pero es posible. Abren sus corazones. Es después de todo, así como nos desearía que Dios nos perdonara. El Santo Padre concluyó:
“Que el próximo Jubileo de la Misericordia aliente a las familias de todo el mundo a redescubrir el poder del perdón, y que permite a nuestra iglesia proclamar el poder del amor reconciliador de Dios obrando en el mundo.”
FUENTE: Audiencia general del Papa Francisco 4 de Noviembre del 2015; “Living Mercy in the Jubilee Year of Mercy” pdf. From USCCB; Kathy Tragos, Ed.M.
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